Accidentes por alcance

El accidente por alcance es aquel accidente en el que un vehículo golpea a otro vehículo por detrás, es decir el llamado “golpe por detrás” de toda la vida.

Este tipo de colisión suele darse cuando el vehículo que va delante, por diferentes imprevistos surgidos en la calzada o retenciones de vehículos, frena de manera muy brusca y repentina haciendo que el vehículo de detrás colisione de un modo brusco.

El accidente por alcance no suele ser de los más graves en comparación con otro tipo de accidentes, aunque si puede derivar en lesiones cervicales importantes para sus víctimas, como son los llamados latigazos cervicales, lesión que se produce por un enérgico y rápido movimiento del cuello hacia atrás y hacia adelante.

En un primer momento la lesión cervical tiene un carácter leve teniendo a evolucionar hasta ser considerada de gravedad, dejando importantes secuelas de por vida a los ocupantes del coche que recibe el golpe.

Tampoco hay que dejar de lado la posible rotura de vértebras la cual puede producirse si el choque entre ambos vehículos es muy brusco.

Accidentes por alcance

Es posible que para su cura, el médico recomiende uno de los siguientes tratamientos: descansar, la toma de relajantes musculares, calor o frío en la zona, medicamentos bajo receta médica, etc.

Entre las posibles consecuencias de un latigazo cervical destacan: limitado movimiento cervical, mareos, dolores de cabeza, visión borrosa, hormigueo, entumecimiento de hombros, manos, brazos y piernas, etc.

Ante un accidente de alcance, ¿quién es el culpable, el vehículo que precede o el que va detrás?

Muy importante estudiar y analizar la situación, por lo que la ayuda de un buen abogado experto en todo tipo de accidentes de tráfico es esencial.

Una conducción responsable, además de respetar las normas de tráfico es la mejor arma que todo conductor tiene para evitar este tipo de incidencias.

¿Cuál es la principal causa de los accidentes por alcance?

Las vacaciones, las salidas de viaje para visitar a familiares en épocas muy concretas como Navidad, Semana Santa, etc., provocan muchos atascos y retenciones especialmente en las salidas y entradas a los centros urbanos.

Todo esto puede dar lugar a una gran cantidad de accidentes de tráfico con importantes lesiones.

En un accidente por alcance haya ocurrido de la forma que sea, ¿por qué el culpable del accidente siempre será el vehículo que colisiona por detrás con el otro vehículo?

La respuesta es muy sencilla; la Ley obliga a mantener en todo momento un espacio libre o distancia de seguridad mínima con todo tipo de vehículo que nos preceda, una distancia que permita detener nuestro vehículo con total seguridad en el caso de que el coche de delante frene de manera repentina, teniendo en cuenta la velocidad y condiciones de adherencia y frenado.

Solo en casos muy excepcionales y demostrables, la culpabilidad e indemnización podría ser compartida.

Cuando se trata de un “doble alcance trasero”, la culpabilidad también es doble; por un lado el segundo vehículo será el responsable de los daños ocasionados al primer coche y el tercer vehículo será responsable de los daños que sufra el segundo vehículo.

Entre las principales causas de accidentes con lesiones en los conductores y/o acompañantes destacan:

  • Colisión trasera o accidentes por alcance.
  • La distracción del conductor
  • La preferencia en los cruces
  • Cambio de carril
  • Marcha atrás
  • Los aparcamientos a la hora de maniobrar

En un accidente por alcance, ¿quiénes tienen derecho a reclamar una indemnización?

Independientemente de quien sea el responsable del accidente de circulación por alcance, todo pasajero que resulte lesionado (tanto de un vehículo como de otro), y el conductor no responsable del accidente tienen derecho a reclamar una indemnización.

Los daños físicos y materiales corren a cargo de la compañía de Seguros del causante del accidente.

El conductor responsable del suceso es el único que no es indemnizado. Resulta esencial contar con un seguro obligatorio de responsabilidad civil para que sea la aseguradora la que se haga cargo de todo tipo de indemnizaciones que corresponde a sus víctimas.

Si uno no cuenta con un abogado experto en accidentes de tráfico, nunca debe de aceptarse una oferta de indemnización por parte de la aseguradora del responsable del incidente, puesto que son muchas las empresas aseguradoras que aprovechándose de la ignorancia de la víctima, ofrecen cuantías de dinero muy por debajo de lo que realmente corresponden.

Contacte y solicite los servicios de un abogado profesional en accidentes de tráfico que proteja y defienda sus derechos.

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