Accidentes laborales mortales
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Se considera accidente laboral mortal aquel cuya consecuencia final es la muerte del trabajador/a, producida hasta un año después de la fecha del accidente. Si este accidente ha sido la consecuencia de una falta de las medidas necesarias de seguridad o de falta de formación de los trabajadores, responsabilidades ambas de la empresa, se puede iniciar un proceso de reclamación, incluso por la vía penal.
En estos casos, bien mediante sentencia o bien mediante acuerdo previo, se puede determinar el pago de una indemnización a los beneficiarios (cónyuge, hijos, ascendientes...).
Para el cálculo de esta indemnización, se suele recurrir al baremo utilizado para el pago por accidentes de tráfico, teniendo en cuenta además las circunstancias particulares del caso (edad del fallecido, número de hijos etc.).
Ante este tipo de situación tan complicada, es muy importante una gestión eficaz y correcta por lo que ponerse en manos expertas es la mejor de las opciones. En nuestro despacho de abogados expertos en accidentes en Bilbao, le haremos saber de todos los pasos a seguir y la manera de actuar ante esta delicada situación, la cuál es muy importante gestionar de la manera más eficaz y correcta posible.
Muerte por un accidente laboral
Cuando se produce un accidente laboral mortal, además de todas las acciones a realizar referentes a la atención del trabajador accidentado, hay otra serie de situaciones que no deben de pasarse por alto como:
- La atención a la familia
- La gestión de la intervención de los agentes de la autoridad policial
- Parte de accidentes de trabajo a rellenar por la empresa.
- Comunicación a los trabajadores de lo ocurrido.
El acompañamiento y apoyo a la familia y compañeros del accidentado en función de las circunstancias de lo sucedido resulta fundamental. Es muy importante la gestión de la intervención de los agentes de los servicios policiales, así como la visita de la inspección y de los técnicos de los gabinetes de prevención de Comunidad Autónoma.
De vital importancia la recogida de los testimonios de los testigos que se encontrasen en el mismo momento y lugar del accidente.
El parte de accidentes es un documento esencial es el parte a cumplimentar por la empresa. A la hora de su elaboración se le debe de prestar una especial atención evitando juicios de valor y opiniones. Comunicar a los trabajadores de lo sucedido antes de que se enteren de lo ocurrido por terceras partes como pueden ser los medios de comunicación, resulta asimismo de vital importancia.
Accidente laboral mortal por imprudencia del trabajador
A pesar de que el accidente laboral sea debido a una imprudencia por parte del trabajador y que, de haberse cumplido con la normativa de seguridad establecida se hubiese evitado o minorado el accidente, no queda eliminado el concepto de accidente de trabajo, aunque sí impide el recargo de prestaciones por tratarse de una medida penal que debe aplicarse siempre que la infracción por parte de la empresa haya sido probada de forma fehaciente.
La doctrina jurisprudencial excluye la responsabilidad empresarial en el pago de estas prestaciones cuando la producción del evento se ha producido de forma fortuita, imprevista, e imprevisible, y no existe constancia de incumplimiento por parte del empresario de las normas de prevención de riesgos.
Si el accidente, en su totalidad o en parte, se ha producido por culpa de una omisión de las medidas de seguridad por parte de la empresa, podrá reclamarse una indemnización por accidente laboral basada en el baremo de responsabilidad civil que genera indemnizaciones.
Además de las indemnizaciones, se le debe sumar el abono de los gastos médicos; y a las indemnizaciones por muerte hay que incluir el coste del entierro y funeral.
Muerte por infarto como accidente laboral
La muerte por estrés laboral, el agotamiento laboral, el infarto, ¿son considerados accidentes laborales?
Dependiendo del momento y situación, la muerte por infarto podrá ser considerada como accidente laboral. Contamos con algunos supuestos en los que la jurisprudencia se ha pronunciado, que pueden orientarnos:
Si el accidente cardiovascular sobreviene antes de comenzar la jornada ya sea en el vestuario, cafetería, zona de descanso, etc., para que pueda ser considerado como accidente de trabajo deben de darse una serie de circunstancias como que exista un plus de puntualidad, que deba de estar con una cierta antelación para que le sea permitido incluir el momento del infarto dentro de la jornada laboral.
Si el suceso sucede en el lugar del trabajo, pero no en el tiempo destinado al desempeño de la actividad laboral, se considerará accidente común y no laboral. Si el infarto sucede al finalizar la jornada laboral, será determinante tener en cuenta el comienzo de los primeros síntomas.
En el supuesto de tratarse de un trabajador autónomo, la situación se complica. El control y la investigación para ser considerado como accidente de trabajo es más restrictivo. Es muy importante demostrar que el infarto se ha producido por consecuencia del trabajo.
El estrés laboral, la fatiga crónica por el exceso de trabajo al final pasan factura. Son los llamados asesinos silenciosos. Si el trabajador se esfuerza por encima de sus capacidades, la salud se ve afectada incluso llegando a matar. En cierta manera se tratan de accidentes mortales ocultos muy complicados y difíciles de demostrar, salvo que suceda en el lugar de trabajo.
Buscar asesoramiento profesional ante cualquier problemática en el trabajo es la mejor de las soluciones para hallar el mejor de los resultados. En nuestro despacho de abogados de accidentes en Bilbao hallará toda la información y asesoramiento que necesita.
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