Baja por accidente de tráfico

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Baja por accidente de tráfico

Cuando un accidente de tráfico impide que la víctima pueda desempeñar su trabajo obtendrá una baja laboral.

Las bajas laborales permiten que se siga cobrando parte del salario. La cuantía de este dependerá de varios factores, por ejemplo, si el accidente se produjo al ir o volver de trabajar (lo que se consideraría accidente laboral) o bien en su tiempo libre.

Además, el accidentado tiene derecho a una indemnización por cada día que no haya podido desempeñar su trabajo, o realizar sus actividades cotidianas habituales.

Por otro, si, desafortunadamente como consecuencia de ese accidente se queda con lesiones permanentes, también se valorará el pago de una indemnización, ya que en este caso podría valorarse una capacidad permanente.

En nuestro despacho de abogados en Bilbao le ayudaremos a entender exactamente cómo es el proceso de reclamación y qué se puede reclamar, acompañándole y asesorándole en todo momento. 

Nuestro principal objetivo es conseguir la máxima indemnización en el menor tiempo posible. Somos independientes de las compañías aseguradoras, no trabajamos para ninguna. 

Nos encargamos de realizar todo tipo de gestiones y tramites necesarios en reclamación de indemnizaciones por accidentes, responsabilidad civil y seguro

Baja médica por accidente de tráfico

La baja laboral que se produce a raíz de un accidente de tráfico no tiene por qué coincidir con la llamada incapacidad temporal. Esto es habitual sobre todo en aquellos casos en los que el accidentado, a pesar de haber recibido el alta laboral, sigue necesitando tratamientos para recuperarse de las secuelas derivadas del accidente.

Esto significa que, a la hora de solicitar la indemnización por la incapacidad temporal, se tendrán en cuenta todos los días en los que el accidentado no ha podido desempeñar, no solo sus actividades laborales, sino sus actividades de la vida diaria.

En estos casos también uno tiene derecho a percibir una indemnización por el periodo en el que la persona accidentada no pudo dedicarse a sus ocupaciones habituales.

Si estando con la baja laboral uno sufre un accidente de tráfico y debe de ser ingresado en la UVI o bien en planta, la indemnización a cobrar será superior en el primer caso y un poquito menor cuando se trate de un ingreso en planta.

Resumiendo, el cálculo de la indemnización se realizará teniendo en cuenta el periodo real durante el cual la persona se ha encontrado impedida. Esto incluye desde la hospitalización hasta todo el periodo posterior hasta que ha podido retomar sus actividades habituales.

Se distinguen tres situaciones diferenciadoras en las que se encontrará la persona accidentada según la gravedad de las lesiones y su evolución:

Por un lado, tenemos los días de hospitalización, que son los que permanece en el centro sanitario recuperándose y recibiendo el tratamiento necesario.


La baja no impeditiva trata de lesiones que precisan de tratamiento médico pero no incapacitan a la persona trabajadora a desempeñar los tareas más habituales.


La persona trabajadora puede desempeñar su trabajo aunque necesita de seguir recibiendo tratamiento para la cura de sus lesiones sufridas en el accidente.

Cuánto cobra un autónomo de baja por un accidente de tráfico

Los días impeditivos son los días de baja por accidente de tráfico, por los que deberá de recibir una cierta cantidad económica por los días de baja laboral. Esta cantidad se incrementa si ha habido hospitalización.

Para pedir una indemnización no es necesario la baja laboral, aunque las cantidades a percibir de la compañía de seguros si se pide o no pide la baja laboral por accidente de tráfico es diferente. 

La Ley de Trafico indica que los días en los que la persona tarda en curar las lesiones pueden dividirse en varios grupos:

  • Días de hospitalización: Aquellos en los que la persona accidentada se halla ingresada, que conllevan a una baja laboral por accidnte de tráfico. El cálculo se realiza según el baremo de accidentes de año 2014.
  • Días impeditivos: Días en los que la persona no puede desempeñar sus tareas habituales como trabajar, labores del hogar, etc. Tiene derecho a una indemnización al día.
  • Días no impeditivos: Días en los que el accidentado ya puede realizar las actividades básicas pero necesita de tratamiento médico.  También tiene derecho a una indemnización aunque con una cuantía económica menor que las anteriores.

Además de la indemnización por accidentes, a los días de baja laboral se le sumarán los gastos de farmacia, gastos de desplazamiento a consultas medicas, rehabilitación, secuelas estéticas o funcionales, etc. 

Con respecto a los trabajadores autónomos las coberturas y prestaciones se han visto modificadas, se ha incorporado la obligación de cotizar por las denominadas contingencias profesionales. 

Todo trabajador, incluido los trabajadores autónomos tiene derecho a recibir una indemnización por las lesiones ocasionadas.

Los derechos del autónomo tras un accidente de tráfico se hallan regulados por el baremo de Tráfico, el cuál determina varios conceptos indemnizables según el alcance de las lesiones. 

Consecuencias de un despido estando de baja por accidente de tráfico

El trabajador puede ser despedido aún estando de baja laboral. Pero, en este caso, la baja en sí misma nunca puede alegarse como motivo de despido. Esto significa que la empresa debe alegar (y demostrar) otras causas que fundamenten el despido.

Hasta la reciente reforma laboral, la falta de asistencia al trabajo ya fuese justificada o injustificada, superior a un determinado porcentaje era situación de despido objetivo. A día de hoy, esta posibilidad de despido ya no existe.

El motivo de despido nunca puede ser la falta intermitente por baja médica.

Como decíamos, la empresa, si quiere realizar el despido de un trabajador, estando este de baja, debe ampararse en otros motivos. El tipo de despido que puede llevar a cabo es:

  • Despido objetivo, en el que se alegan causas económicas, organizativas, técnicas o de producción.
  • Despido disciplinario, debido a un incumplimiento grave y culpable por parte del trabajador.

Sea cual sea el despido, debe estar debidamente justificado. En caso contrario, el trabajador puede impugnar dicho despido, primero a través de la vía extrajudicial (acto de conciliación) o, en caso de no alcanzar acuerdo con la empresa, la vía judicial.

Será un juez quién determine en este segundo caso la improcedencia o no del despido. Recordemos que declarar un despido improcedente implica el pago de una indemnización al trabajador.

Solo en algunos casos puntuales puede declararse el despido nulo, lo que conlleva la reincorporación al puesto de trabajo y el cobro de los salarios dejados de percibir durante el proceso de reclamación.

Si durante una baja laboral ha sido despedido, es importante buscar cuanto antes asesoramiento legal para estudiar el caso y la documentación aportada e iniciar un proceso de reclamación.

En nuestro bufete de abogados en Bilbao encontrará un equipo de abogados especialistas en despidos e indemnizaciones que le asesorarán ante cualquier tipo de situación.

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